Disfunciones ATM

La articulación temporomandibular (también llamada complejo articular craneomandibular) es la articulación sinovial tipo bicondilea que existe entre el hueso temporal y la mandíbula . En realidad se trata dos articulaciones, una a cada lado de la cabeza, que funcionan sincronizadamente y nos permiten realizar la apertura y cierre de la boca. Es una de las pocas articulaciones móviles que hay en la cabeza, junto con la cabeza del atlantooccipital.

Como superficies articulares de esta articulación encontramos: parte de la fosa mandibular, el tubérculo de cada uno de los huesos temporales y la apófisis condilar de la mandíbula.

  • Cóndilo mandibular: Es una eminencia elipsoidea situada en el borde superior de la rama ascendente de la mandíbula, a la que está unida por un segmento llamado cuello del cóndilo. La superficie articular tiene dos vertientes: Una anterior, convexa, que mira arriba y adelante y otra posterior, plana y vertical.
  • El tubérculo articular y la fosa mandibular representan las superficies articulares del temporal, en correspondencia con la de la mandíbula. La cavidad glenoidea se encuentra dividida en dos zonas, separadas por la cisura de Glasser
  • Disco interarticular: Entre ambas superficies articulares se emerge en la cara superior un disco articular entre el cóndilo de la mandíbula y la fosa mandibular. Esteamenisco acompañe a la mandíbula en sus desplazamientos. Se puede afirmar que menisco y cóndilo mandibular forman una unidad anatómica y funcional.

Esta articulación está provista de un potente sistema cápsulo-ligamentoso, que tiene una función pasiva limitando así los movimientos estabilizando esta articulación y membranas sinoviales que son membranas de tejido conectivo laxo que tapizan la cápsula articular por su superficie interior. Es la parte más ricamente vascularizada de la articulación segregando  líquido sinovial. Esta articulación posee dos: La membrana sinovial superior y la membrana sinovial inferior.

Del papel activo de la articulación se encarga la musculatura dividida en músculos elevadores, depresores, protusores, retrusores y diductores.

La disfunción o trastorno de la articulación temporomandibular (ATM) es muy común y afecta a un 20-40% de la población siendo el dolor de mandíbula  uno de los síntomas más característicos de la disfunción de la ATM. El tratamiento conservador es eficaz en el 90% de los casos.

Esta articulación puede encontrarse en disfunción por las siguientes causas

  • Existencia de una mala oclusión; es decir, un defecto en la alineación de los dientes.
  • Bruxismo.
  • Malos hábitos posturales.
  • Traumatismo que resulta en el desplazamiento del disco articular.
  • Estrés/ Tensión emocional.
  • Contractura muscular.
  • Tratamientos dentales mal realizados.

Síntomas de la disfunción temporomandibular

Aunque algunas personas con disfunción temporomandibular no presentan ningún síntoma, hay una serie de signos que pueden delatar su existencia

  • Chasquidos al abrir la boca.
  • Desgaste de piezas dentales
  • Lengua dentada.
  • Tensión muscular  con presencia de puntos gatillo miofasciales en la musculatura oclusora; masateros y temporales.
  • Cefalea, en muchas ocasiones de predominio matutino.
  • Dolor de oído
  • Dolor mandibular matutino.
  • Limitación en la apertura bucal.
  • Acúfenos

En el proceso de  tratamiento de las disfunciones de la ATM; que debe ser multidisciplinar, pueden intervenir el fisioterapeuta para la valoración de las posibles causas posturales y alteraciones musculares o de origen articular que afecten al movimiento de las articulaciones implicadas, el odontólogo para una valoración del encaje de las piezas dentales, el psicólogo en relación a la salud mental y valoración del estrés o esfera emocional del paciente y en última instancia podría valorarse la opción quirúrgica si el tratamiento conservador fracasara.

El tratamiento de fisioterapia puede realizarse a través de técnicas de terapia manual articular para la columna dorsal, cervical, articulación de la ATM, técnicas miofuncionales del área implicada, reeducación postural, pedagogía del dolor, electroterapia y/ o técnicas invasivas si fuera necesario.